He vuelto a sembrar en TdP
y he comprendido por qué dejé de hacerlo.
Era, es, sembrar y ponerme a "esperar"
deseoso, anhelante,
a que alguien elogie mi siembra,
para sentirme orgulloso, arrogante, vanidoso.
He vuelto a sembrar en TdP
y tras un primer comentario brillaron mis ojos;
me he rendido al halago de unas palabras directas,
y por un momento he creído
que no está mal lo que hago,
que sé escribir, que soy un poeta.
He vuelto a sembrar en TdP,
y al final, como siempre,
me he despertado sintiéndome mal,
como resacado,
añorando el instante en que mis ojos brillaron,
pero más convencido que nunca de estar vacío,
de que sigo sin ser nada,
de que sigo sin ser nadie.
Jose D.
4-I-06
No hay comentarios:
Publicar un comentario